El Govern de la Generalitat, ahora en funciones, ha llamado a la reflexión después que el proyecto independentista y de izquierdas -liderado por ERC en la pasada legislatura- perdiera 20 escaños y cerca de 180.000 votos en las elecciones celebradas este domingo. "Ha sido un resultado malo para el movimiento independentista", ha asegurado con contundencia la portavoz del Govern en funciones, Patrícia Plaja, este martes.
En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consell Executiu, la portavoz también ha reconocido que hace falta una reflexión en cuanto "al mensaje de desafección" que ha dejado las urnas. En las elecciones catalanas, la participación fue del 57%, lejos de los números récord durante el punto álgido del 'procés'. Sobre la abstención, Plaja lo ha relacionado con una posible "falta de participación del movimiento independentista" y ha asegurado que es momento de analizar las causas que han llevado a ello.
Por otro lado, desde el Govern en funciones han constatado la “preocupación” por el aumento de la extrema derecha y ha avisado que es “una amenaza para la democracia”. De hecho, en los comicios celebrados este domingo, Vox mantuvo sus 11 escaños, mientras que Aliança Catalana irrumpió en el Parlament con 2. "Hay que analizar porque parte de la ciudadanía ha optado por estas formaciones", ha señalado Plaja.
La distribución parlamentaria tras el 12M dibuja un escenario que requiere de pactos para formar un nuevo Govern. El ejecutivo catalán es consciente de "la aritmética parlamentaria" y por ello, según Plaja, Aragonès ha instado al resto de consellers a que "sigan ejerciendo sus responsabilidades" hasta el final. La portavoz ha asegurado que "no es bueno" alargar el Govern en funciones ni tampoco una repetición electoral.
Sobre la posibilidad de que se vuelvan a celebrar comicios en Cataluña en otoño, Plaja ha explicado en la rueda de prensa que el coste para la administración sería menor pero que comportaría un gasto de 30 millones de euros para las arcas públicas.
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